El COVID-19 ya no es visto como emergencia en Francia, pero… ¿En México?
Maria Van Kerkhove, jefa técnica de la Organización Mundial de la Salud (OMS), dijo durante junio que
“no estamos viviendo responsablemente con el COVID-19… no ha terminado y estamos jugando con fuego al dejar que este virus circule a niveles tan intensos”.
Con diferencia de días, países como Francia anunciaron que pondrán fin a la emergencia sanitaria, y que el 1 de agosto entra en vigor para ellos el régimen de excepción de impuesto por la pandemia.
Sin saber este actuar, Van Kerkhove criticó que “muchos países han abandonado las medidas de salud pública (cubrebocas en interiores, distanciamiento social), no han invertido (ventilación, EPP, HCW), continúan politizando el COVID-19, socavando la efectividad de las herramientas que funcionan, y esto permite que el virus continúe circulando intensamente”.
En México, sólo el 28 de julio se reportaron 24 mil 893 contagios y 113 muertes por COVID-19. El informe técnico de la Secretaría de Salud informó que con dicho corte se acumulan 6 millones 711 mil 847 casos positivos y 327 mil 525 defunciones a causa del virus. También dijo que en julio hubieron más de 700 mil casos COVID.
Para el cierre de mes se tenían detectados 192 mil 206 casos activos de COVID-19, de manera predominante en Ciudad de México, Colima, Baja California Sur, San Luis Potosí, Querétaro, Coahuila, Tlaxcala, Sinaloa, Nuevo León y Aguascalientes. La mayor parte de los casos están presentes en los grupos de 18 a 29 años, seguido del de 30 a 39 años y 40 a 49 años.
La distribución por sexo en las defunciones dicta que el 62% son hombres. La mediana de edad en los decesos es de 64 años.
A pesar de las cifras, fue la Comisión Especial para la Atención de la Emergencia por COVID-19, de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), quien dio a conocer que las condiciones actuales de la pandemia permitirán tener clases presenciales en todas sus sedes para el ciclo escolar que arranca el 5 de agosto.
La máxima casa de estudios dijo que la llamada quinta ola de contagios de SARS-CoV-2 tuvo un impacto notablemente menor que en ocasiones previas, y que su mayor actividad ocurrió entre la última semana de junio y la tercera semana de julio, siendo el 11 de julio el día donde surgieron más positivos. También detalló que fue la CDMX donde se presentaron 1 de cada 4 casos de esta enfermedad.
La UNAM destacó que el número de defunciones se mantiene en “niveles muy bajos” y que se espera que disminuya el número de casos y de riesgo de contagio, ya que al igual que en la cuarta ola, predominada por Ómicron, los síntomas fueron de tipo catarro, sin afectación a los pulmones o al resto del cuerpo, aunque sí de rápida propagación y recontagio.
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Como parte del estudio también se dijo que de la población mayor a 18 años de edad, el 90% tiene vacuna, y en adolescentes de 12 a 17 años es del 60%, con un aumento paulatino.
Para determinar que el regreso a clases de la población universitaria es seguro, también se dijo que durante el tiempo que se realizaron actividades presenciales en los últimos meses, con la aplicación adecuada de las medidas generales de precaución, se previnieron de forma efectiva los contagios, aún en momentos de alta intensidad epidémica.
Uso correcto del cubrebocas al realizar actividades en espacios cerrados y al estar en lugares abiertos con otras personas donde se pierda la sana distancia; así como promover la ventilación de espacios cerrados, estar vacunado con esquema completo y acudir a los refuerzos, aislarse en caso de síntomas y no automedicarse, son las medidas que recomiendan seguir. ¿Ustedes están listos para volver a la normalidad?
